Artículo del Portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Castellón, Vicente Vidal. Publicado en Levane de Castelló 13/05/2017

 

La gran mayoría de los vecinos de Castellón son gente de clase media. Seguramente usted también lo sea. Gente trabajadora, que intenta sacar a su familia adelante con mayores o menores obstáculos (generalmente lo primero), que hace malabares para pagar sus facturas y llegar a fin de mes bastante ajustado, que invierte su dinero en los gastos urgentes e ineludibles e intenta ahorrar para poder salir a cenar algún día o con suerte hacer un viaje en vacaciones. Es esa clase media la que ha sufrido también la presión de la crisis con subidas de impuestos, financiando con su dinero las necesidades de la administración y la sociedad. Y por ello, ahora que la tendencia está cambiando, es esa clase media la que, después del esfuerzo y el sacrificio, merece pagar menos. Eso es lo que defendemos desde Ciudadanos: Rebajar los impuestos a los castellonenses si existe supéravit en el Ayuntamiento y crecimiento económico, como es el caso. Por contra, el bipartito los ha subido al 60% de los vecinos de Castellón, también a las empresas, amparándose en la progresividad. ¿Acaso el 60% de los castellonenses son ricos?

 

Desde el inicio de la legislatura Ciudadanos ha pedido no sólo que se rebajen los impuestos sino también que se revisasen los valores catastrales porque el valor catastral que rige actualmente se fijó en plena burbuja inmobiliaria y no se corresponde con el valor real actual de las viviendas, que ha bajado por la crisis. Sin embargo, pese a saber que no era un criterio justo, el bipartito lo está utilizando para calcular los impuestos a pagar, lo que está generando que los castellonenses paguen tributos más elevados de lo que debería ser. De ahí la insistencia de nuestro grupo municipal para que se realizase una revisión urgente. El bipartito ha tardado dos años en pedirla. Llega tarde como siempre, pero por fin ha escuchado nuestras peticiones. Esta revisión traerá aparejada una bajada de los valores catastrales y por tanto, lo consecuente es que lleve aparejada una bajada del Impuesto de Bienes Inmuebles (dudamos de si llegará a tiempo para el recibo de 2018, ojalá), y esto supondrá menos ingresos para las arcas municipales. Y ahí llega nuestro miedo, porque dado el afán recaudatorio de nuestro equipo de Gobierno, que ha demostrado en estos dos años actuar a imagen y semejanza del ‘tío Gilito’, nos tememos que quieran compensar esa bajada en la recaudación subiéndole otros impuestos a los castellonenses. Por supuesto, en ese caso encontrarán a Ciudadanos en frente.

 

Porque si hay un partido que está defendiendo los derechos de la clase media trabajadora en este país, es, sin duda, Ciudadanos. Nos habrá visto defendiendo a los autónomos y a las pymes, nos oirá siempre pidiendo justicia fiscal para quienes no son ni mucho menos ricos y pagan sus impuestos religiosamente. En Castellón hemos sido muy beligerantes también en este ámbito. Pedimos que se devuelvan de oficio las plusvalías cobradas indebidamente a quienes vendieron su piso por menos de lo que lo compraron y, por supuesto, que no se siguiese cobrando lo que no es justo. Obtuvimos un ‘no’ por respuesta. Pedimos que quienes tuviesen un huerto mal catalogado no pagasen como si tuviesen un piso en el centro. El tripartito no quiso aceptarlo. Pedimos también que esos casos de suelo rústico mal calificado como urbano no pagasen plusvalías. El bipartito se negó pese a que las sentencias nos avalan. Pedimos ayudas para que las familias más necesitadas pudiesen hacer frente al pago del IBI y una vez más nos topamos con la negativa del tripartito. Intentamos hacerles reflexionar para que no subiesen los impuestos en la última modificación de las ordenanzas y no quisieron escucharnos. Pero no nos rendimos y seguiremos reclamando y luchando por lo que creemos que es justo: que usted, de clase media trabajadora, que abona religiosamente sus impuestos, merece pagar menos. Es de justicia. Este Castellón mío, este Castellón nuestro, ay, ay.