Artículo de opinión de la portavoz de Ciudadanos (Cs) en la Diputación de Castellón, Cristina Gabarda. Publicado en elperiodic.com 29/06/2017

Este versículo del evangelio, bien se podría aplicar a Castelló Sense Moviment y no precisamente por su origen religioso, sino más bien por una cuestión de fondo. De significado semántico. Y es que Castelló Sense Moviment y marca blanca de Podemos, es lo que se suele llamar, por seguir con el refranero, un perro ladrador pero poco mordedor.

Y es que cuan acostumbrados estamos a escucharles sus lecciones de moralidad y de regeneración, pero eso sí desde autobuses o rodeando el Congreso, porque si Podemos sólo presenta cosas presentadas en el Congreso de los Diputados, muchas de las proposiciones que presenta Castelló sense Moviment en el Ayuntamiento de Castellón son inviables técnicamente o incluso, ilegales, como el caso de negar la contratación a las empresas que no están condenadas formalmente. Y luego rechazan propuestas factibles de Ciudadanos (Cs) que sí pretenden luchar contra la corrupción como la defensa y protección de los funcionarios que denuncian malas prácticas.

Por si no fuera poco, en Les Corts, aparentemente, son incapaces de apoyar la eliminación de los aforamientos como pedía Cs. Es decir, Podemos apoya que los políticos continúen siendo unos privilegiados ante la justicia. Sorprendente o no, la realidad es que mucho ruido y pocas nueces.

Pero es que la historia no acaba aquí. En la Diputación de Castellón ¿saben cuál es su función? No hacer nada. No recuerdo la última vez que Castelló Sense Moviment presentó una iniciativa para mejorar la vida de nuestros vecinos de la provincia. Sin embargo, constantemente ponen trabas a las iniciativas de los demás grupos sin aportar nada constructivo. Por eso, desde Cs les pedimos que, al menos, cuando se hagan propuestas buscando la limpieza de nuestras instituciones tengan la dignidad de alzar la mano para apoyarlas, aunque les suponga demasiado trabajo.