Artículo de la portavoz de Cs en la Diputación de Castellón, Cristina Gabarda. Publicado en El Periódico Mediterráneo el 22/03/2017.

 

Como todos los años, nuestra fiesta grande ha llegado para inundar las calles de luz, de color, y de olor a pólvora. Da gusto ver como los castellonenses se echan a la calle para disfrutar de las fiestas y dar la bienvenida a los vecinos de todos los rincones de la provincia. Así, hemos podido ver desde los más pequeños de cada casa hasta los más mayores desfilando en los pregones y tapándose los oídos ante el ruido de las mascletas. También hemos podido participar junto a todos los ciudadanos de la primera Romería declarada como BIC, aunque como es habitual en este equipo de Gobierno no ha estado exenta de polémicas.

 

Y es que el bipartito tiene el don de molestar a todo el mundo y en Magdalena no iba a ser menos. Este año le ha tocado, fundamentalmente, a las collas quienes se han quejado por los cambios impuestos que no propuestos por el Ejecutivo porque lo suyo, seamos claros, tampoco es precisamente la defensa de la libertad de elección.

 

Dicho lo cual, entre las protestas destacan el insuficiente espacio habilitado para el número de carros engalanados, los horarios establecidos tanto para la Tornà de la romería como para el pregón infantil o el precio excesivo del Mercado Artesanal. Desde Ciudadanos también hemos denunciado, además, que ninguna de las empresas beneficiadas por las adjudicaciones sean de Castellón, una pena.

 

Así pues, lo más importante es que para el año que viene se busquen soluciones alternativas, pues la fiesta somos todos y las collas son también entes vinculados, que merecen su espacio y no únicamente ser un segundo plato.

 

Otro ejemplo de la discriminación que hace este bi/tripartito es la ofrenda cuyo horario es distinto para unos y para otros. Y me pregunto, ¿hay algo más bonito que estar todos compenetrados haciendo cada acto más grande?, ¿por qué hacer tanta distinción?. Al fin y al cabo, todos queremos disfrutar de nuestras fiestas, todos queremos lo mejor para nuestra ciudad y la diversidad y la unión es, sin duda, lo mejor que podemos tener en nuestra terreta, en nuestra Magdalena.

Cristina Gabarda