Artículo del portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Vila-real, Domingo Vicent. Publicado en El Periódico Mediterráneo 24/05/2017
Nada más empezar la legislatura nos encontramos con la aplicación de una sentencia que obligaba a que los terrenos urbanizables sin ningún desarrollo no tuvieran la calificación de urbanos a efectos del IBI. Esto quería decir que existían propietarios que habían pagado contribución urbana en lugar de rústica, y ahora tenían el derecho a recuperar lo pagado en exceso. Primer golpe al aparato recaudador de la Administración Local. En el caso de Vila-real, menor recaudación para este año y obligación de devolver las diferencias del anterior.
Este año empezaba con otro fallo que declaraba inconstitucional la plusvalía, cuando no se había producido un beneficio en la venta. Cs fue el primer partido en ponerlo sobre la mesa, entre acusaciones de alarmismo porque afectaba a una norma foral, en realidad solo era una excusa.
Ahora el TC ha ratificado su posición sobre la norma estatal y pone a los ayuntamientos a los pies de los caballos. Especialmente grave será el efecto en Vila-real. No porque nuestro Consistorio tenga que devolver una parte significativamente mayor de los más de 10.000 millones que los españoles recuperarán, sino sobre todo porque los vecinos pagan más de la media y además sufren este año una fuerte subida del IBI.
Seis años de bipartito han servido para demostrar la incapacidad de Benlloch, su equipo y sus socios, para adaptar el gasto a la realidad. Han dilapidado el exceso de recursos que recibían por la mala definición de la plusvalía o por la contribución urbana ficticia. Han vivido por encima de nuestras posibilidades, alimentando la maquinaria propagandística y fingiendo con anuncios ficticios que Vila-real “avança”. Nada más lejos de la realidad, la industria ha huido y solo gracias a la presencia de una multinacional líder se pueden maquillar las cifras.
Para acabar con la semana horribilis, nos vuelven a denegar los FEDER, pese a las pataletas. Y en Cs, nos preguntamos ahora qué, señor Benlloch ¿vendrán más subidas de impuestos? ¿habrán más retrasos a proveedores? ¿o continuará concentrando sus fuerzas en recoger firmas y defender su causa perdida en el Partido Socialista?.